viernes, 8 de enero de 2010

Para cruzar exitosamente

Primero que nada hay que tener dos cosas claras: La primera es que un hombre y una mujer no pueden ser amigos. No. Sencillamente no pueden. Más bien no deben o no deberían. Pero la sociedad dice que sí, porque de lo contrario serías un retrógrada o machista o sexista o cualquier otro "ista" que se les antoje. Pero no vale la pena pelear contra la sociedad, es como correr hacia callejones, por eso vengo contigo y te cuento lo que puede ser mi más nueva teoría. Sé que tal vez tú lo comprendas, puede que no estés de acuerdo al principio pero si lo analizas friamente te darás cuenta que tengo sentido:

Antes que nada somos animales, British. Te sorprendería saber lo primitivos que podemos ser. La descarada contradicción que es el ser humano. Nos jactamos de ser racionales, intelectuales, de ser la especie pensante pero daríamos asco hasta al más misero grillo. ¿Por qué? Porque somos la única raza que se autodestruye, piénsalo. No sólo nos matamos por dinero, por territorio, por petróleo, por envidia, por poder, también contaminamos con cada paso que damos el aire y el suelo y el agua, todo. Privatizamos ríos, bosques, montañas y lo vendemos al mejor postor. Tenemos que ser por mucho la especie peor organizada del universo porque elegimos a cualquier imbécil para que nos represente y nos cobre impuestos y nos ponga un salario mínimo y nos haga cada vez más mediocres e infelices. 'Pero tenemos computadoras y carros y cohetes espaciales y celulares... ¡no podemos ser tan frívolos!' Pero claro que lo somos, lo gritamos a los cuatro vientos con más pena que gloria. Nos esforzamos tanto para insertar nuestras vidas hechas tarjeta en pequeñas ranuras que perforamos día tras día alimentando el mounstro de la rutina que ya es casi nuestro mejor amigo. Romper de la tradición nos da miedo y por eso rezamos y rezamos y vamos a misa con la triste ilusión de que algún día algo increíble va a pasar que nos sacará de la mierda. Pero ese milagro nunca llegará y por eso vemos la tele para distraernos un rato. Y compramos cosas que no necesitamos y nos ingeniamos la forma para chingar a los demás. Pero no somos mas que buitres con ipods. Somos monos con internet.

Teniendo eso claro es prudente decir que somos instintivos. Tenemos necesidades: de comer, de dormir, de tener un hogar, de sentirnos pertenecientes, de desarrollarnos y relacionarnos en un entorno. Y obviamente, tenemos la necesidad de reproducirnos. Aquí es donde se pone interesante... El hombre y la mujer, hasta donde tengo entendido, son diferentes. Muy diferentes. ¡Y no sé, tal vez no fuimos hechos para ser amigos! Considero que tal cosa como una amistad, en el más puro de los conceptos, no puede existir entre un hombre y una mujer. Sería un hipócrita el que me garantice que nunca ha pensado en formas eróticas o sexuales en sus amigos o amigas, respectivamente. ¿O sabes cómo sí podrían dos personas ser amigos? Los dos tienen que ser feos y gordos. Ahí sí no hay pierde...

La segunda cosa que hay que aclarar es que EN CASO de que, efectivamente, un hombre y una mujer lograran consolidar una amistad con éxito, tener sexo entre ellos no tiene nada de malo. ¡Nada! Pero la puta moral dice que no, entonces no. Y es una estupidez, tener sexo entre amigos podría bien ser el mejor invento desde el pan en rebanadas. Lo que yo creo es que la gente tiene miedo de generar sentimientos, encontrar que hay algo más que sólo amistad. Hay afecto, hay amor. Y si descubren que hubo eso todo el tiempo caerán en la conclusión que nuevamente, nunca fueron amigos. Y aquí es donde digo 'jaque mate'... ¿Qué opinas, Brit?

Te advierto que a las mujeres les resulta ofensivo oírla, por alguna razón. Es una teoría altamente separatista. Todo esto te lo explico porque necesito tu punto de vista para algo. He estado tratando de descifrar el arte de pasar por el puente de amigos sin caer en la tan odiada friend zone. ¿Sabes de lo que hablo, verdad? La otra noche en una fiesta conocí a una amiga de Daniel, un amigo. Se llama Sofía. Le pedí su correo y hemos hablado mucho por internet. Puede que salgamos todos juntos un día de estos pero tengo miedo de atravesar la delgada línea y caer de hocico en esa amistad de papel que a nadie conviene. Es la puta cuerda floja, un paso de más o un paso de menos puede ser mortal y no hay vuelta atrás. Por eso hay que pensarlo bien, el juego de trapecistas también tiene su truco y el circo paga bien por el espectáculo. Estoy tratando de reestructurar mis pensamientos, planeo cuidadosamente mi siguiente movimiento pero sé que tampoco tenemos mucho tiempo. Si hubiera un instructivo para ésto diría algo así como: "Para cruzar exitosamente el puente se necesita..."