lunes, 23 de febrero de 2009

Hermosos desastres

Obscuridad y Confusión juegan maliciosamente en el jardín del Edén. Y del caos y la devastación brotan las semillas de los verdaderos colores:
El arte, y nace Ian Curtis con un Rembrandt en manos.
Se descubre el café y a lo lejos proyectan "Trainspotting" una tarde lluviosa de algun Febrero y la vemos diez veces refugiados bajo una sombrilla púrpura.
Jugamos ajedrez. Y leemos Rayuela pero no entendemos.
Y nos gana la melancolía, y extrañamos.
Y lloramos. Y discutimos (vive la difference) hasta no poder más pero nos matamos mutuamente. Y nos destruimos. Si, nos destruimos.
Y de esas dulces catástofes sólo nace más belleza. Abrimos los ojos a un mundo de contrastes y nos damos cuenta que podemos ser testigos de tanto dolor y de tanto esplendor. Tú eliges.
El sol sale otra vez.
Y es tan hermoso, y tan desastroso.